martes, 10 de febrero de 2015

¿Sabes cómo elegir un entrenador personal?

Dar el paso y decidirte por contratar los servicios de un entrenador personal, o un personal trainer, como más te guste llamarnos, no siempre es fácil, montones de mitos sobre el entrenamiento personal hacen que nuestra profesión se piense para personas con un alto poder adquisitivo, personajes públicos,... sin embargo también gente anónima lo hace, para conseguir cambiar su estilo de vida y con ello alcanzar sus objetivos, sean estos los que sea.

Ahora bien, teniendo en cuenta que la mayoría de las personas que contratan un entrenador personal, lo hacen por  motivos de salud y no de estética, creo muy conveniente antes de dar este paso que tengas en cuenta algunos aspectos, aspectos que te dirán si la persona que tienes delante es o no es un entrenador personal capacitado:

1º. Formación, asegúrate que tiene la formación suficiente para entrenarte a ti o a otros, a la hora de entrenar personas no todo vale, y un curso de un fin de semana no convierte a nadie en entrenador. No te preocupes por pedir credenciales y titulaciones, tu salud está en juego.

2º. Experiencia, no todo lo que sabe un buen entrenador viene de sus formaciones, la experiencia es un grado y generalmente cuantos más años lleve en la profesión, con más personas habrá entrenado, luego más casos diferentes habrá tratado, eso te beneficia a la hora de iniciar un plan de entrenamiento.

3º. Referencias, es casi seguro que el entrenador personal con el que estés hablando, o el gimnasio en el que te estés informando, tengan página web, blog, canal de Youtube, Instagram,... o quizá haya entrenado con algún conocido tuyo antes, busca información y determina si es tu mejor opción, piensa que durante un tiempo vas a entrenar con él, te va a guiar y deberás hacerle caso en todo, luego tiene que haber una cierta conexión, infórmate bien antes de empezar para no llevarte una mala experiencia.

4º. Realista y honrado, cuando mis clientes me preguntan "¿en cuánto tiempo conseguiré alcanzar mis objetivos?" la verdad es que la respuesta suele ser la misma para todos: no lo sé, dependerá de tu implicación en el programa, de tu propio cuerpo y de factores externos que no siempre podremos controlar, lo mejor es empezar cuanto antes y valorar periódicamente los resultados. Prefiero eso a prometer que voy a dar unos resultados que nunca se van a alcanzar, y por supuesto ser realista y trabajar siempre desde el lado de la salud.

5º. Objetivos claros, lo más normal es que antes de empezar a entrenar tengáis una reunión previa, para marcar unas metas a conseguir e intentar darles un plazo para llegar a ellas, estas metas deben ser realistas, medibles, y alcanzables, una especie de contrato entre ambos, con el que quedará comprendido por ambas partes qué se quiere, cuándo se quiere, y qué tiene que pasar para conseguirlo.

6º. Buen comunicador, en una sesión de entrenamiento personal, hay montones de variables sobre las que el entrenador deberá estar pendiente y hacer que tú lo estés también, a parte de correcciones para no hacerte daño durante la ejecución de los movimientos, por ello debes asegurarte de que la comunicación con él sea fluida y comprensible, algunos en su empeño por demostrar todo lo que saben hablan con un lenguaje excesivamente técnico y la verdad es que no hay quien les entienda.


Si aun así no te queda claro pide una prueba de entrenamiento, así sabrás de primera mano qué es lo que vas a encontrarte durante los próximos meses, en el transcurso de tu programa de entrenamiento.

photo credit: DSC_0036 via photopin (license)
 photo credit: DSC_0162 via photopin (license)

No hay comentarios:

Publicar un comentario